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miércoles, 16 de junio de 2021

LVDI RVBRICATI MMXXI. LOS PUEBLOS DEL MEDITERRÁNEO


Después de un año ausente por la pandemia, hemos vuelto a disfrutar del festival romano Lvdi Rvbricati, ubicado en los diferentes espacios del Museu de Sant Boi de Llobregat. Este año está dedicado a diversos aspectos de la vida cotidiana de los pueblos del Mediterráneo.


Quien ya conoce los Lvdi, sabe que es una ocasión fantástica para trasladarse a la antigua Roma desde los cinco sentidos, un festival donde el rigor está presente, sí, pero también la ironía y la diversión. Un grupo excelente de profesionales de diversas disciplinas están detrás de talleres, exhibiciones y actividades para conseguir llevarnos durante un fin de semana a las puertas de la mismísima Roma.


Sin embargo, este año la situación tan particular que nos toca vivir ha exigido que el festival se desdoblase en divulgación presencial y virtual, con la voluntad de llegar así al mayor número posible de visitantes.


Aunque las estrictas medidas de seguridad impiden la manipulación de objetos, el contacto con la gente y las aglomeraciones, no por eso el festival ha perdido punch (palabra bárbara muy de moda para significar brío o atracción). La información, los talleres, los tutoriales y hasta un Kahoot se pueden seguir a través de vídeos (geniales) que se pueden consultar en la web del Museo, y que se combinan con las actividades y exhibiciones presenciales.


Así, entre los vídeos y la visita a las instalaciones del Museo, mascarilla y gel hidroalcohólico mediante, nos contagiamos del espíritu romano y nos quedamos atrapados en la cotidianeidad de los pueblos del Mediterráneo antiguo.


Vamos allá.


Empezaremos con un poco de incienso, que en la antigua Roma servía para todo, desde dar las gracias a los dioses hasta purificar el ambiente. El incienso impregnaba la vida cotidiana del pueblo romano. Todos sus secretos se revelan en el vídeo INCENSVM.


Recorriendo los rincones del Museo nos encontramos de todo. SIMILA es un espacio de recreación donde observamos cómo se elabora la sémola, “la mejor harina del trigo”. Nos lo explican unas auténticas expertas, testigos de la elaboración de la sémola tal como aún la hacen los pueblos bereberes del norte de África. Por algo uno de los elementos comunes a todos los pueblos mediterráneos es el alimento basado en el cereal.

En la parte virtual, podemos observar también cómo se elabora la TERRA SIGILLATA, una cerámica rojiza de extraordinaria calidad que es tan romana como el cereal.



El taller SCRIPTORIUM está dedicado a descifrar lenguas antiguas, enseñando los rudimentos de la escritura jeroglífica, griega, ibera y romana. Y podemos practicar la tipografía romana en el espacio virtual hasta convertirnos en un auténtico ordinator: SCRIPTORIVM.



Los secretos de tocador también están presentes en los Lvdi. Un análisis de los símbolos grecolatinos nos aproxima a los misterios de lo femenino en GYNAECEI SECRETVM y la ORNATRIX nos enseña las claves de los peinados de las mujeres, desde cómo transformar el cabello hasta quién marcaba tendencia en todo el Mare Nostrvm.



IN SCAENAM es el espacio dedicado al teatro y la comedia, el entretenimiento y la diversión más desvergonzadas. Además, con el tutorial LIRA podemos aprender a hacernos un instrumento como los que tenían griegos y romanos, consiguiendo ya de paso darle vida a la banda sonora de los Lvdi Rvbricati.



AELIA GALLA PLACIDIA es una recreación sobre esta gran mujer, hija de Teodosio I. Con motivo de los Lvdi, la emperatriz nos vuelve a visitar, acompañada de su séquito. ¡Desde el siglo V no pisaba Barcino!



GALENVS ET GLADIATORES. También nos visita Galeno, cirujano, filósofo y unos de los principales médicos de la Antigüedad. Y no viene solo, lo acompañan varios gladiadores y gladiatrices venidos de varios puntos del Mediterráneo.

Galeno adquirió reputación siendo médico de gladiadores en Pérgamo, y sus tratados de medicina y dietética pasaron a la posteridad. Por cierto, nos podemos confeccionar nuestro propio ungüento a base de plantas medicinales si seguimos los pasos del tutorial CERATO: APVD GALENVM.




La parte virtual del festival también nos habla de las minas y canteras en la Hispania Tarraconense. LAPIS SPECVLARIS nos habla de la explotación de las minas de mármol (Macael), y el proceso de extracción del yeso selenítico (mina de Arboleas), un mineral de múltiples usos, incluido el de “vidrio” para ventanas. ALTERI DEI es un documental sobre la religión y los rituales del pueblo ibero a través del análisis de los restos arqueológicos. Y por último, la parte virtual nos permite construirnos una maqueta de un arco de triunfo (TRIVMPHALIS ARCVS), disfrutar con el cuento de IVLIVS ANICETUS y hasta ponerse a prueba con un KAHOOT sobre los pueblos del Mediterráneo.


Todo nos sabe a poco, así que roguemos a los dioses para que la próxima edición podamos volver a disfrutar del festival con los cinco sentidos.



fotos: @Abemvs_incena

jueves, 14 de junio de 2018

CONVIVIUM EN EL RUBRICATUS


El pasado fin de semana el Museu de Sant Boi de Llobregat celebró la decimoquinta edición del festival LVDI RVBRICATI, dedicado al mundo romano. En esta ocasión, todas las actividades, talleres y exhibiciones giraban en torno a la temática del banquete romano, el CONVIVIUM.

Ubicado en los espacios del Museu de Sant Boi -los jardines de Can Barraquer, la masía de Can Torrents y las Termas Romanas-, el festival Lvdi Rvbricati cuenta con la enorme particularidad de saber hacernos sentir bien a todos. El buen humor se mezcla con el rigor histórico, la risa con la seriedad, la didáctica más básica con la investigación académica más sesuda… Y es que tras cada una de las actividades hay una labor intensa de trabajo, curiosidad, investigación y pasión.

Pues bien, durante el fin de semana el Museu nos permitió trasladarnos en el tiempo y nos llevó al Rubricatus del siglo I dC, en plena época de Augusto, donde talleres y actividades ayudaban al público a hacerse una composición completa de todos los elementos que rodean a un banquete romano.

Por ejemplo, algunos talleres infantiles (y no tanto) estaban dedicados a cómo arreglarse para asistir al convivium, como el de peinarse correctamente (Ornatrix), el de confeccionar tejidos (Textrina), o el de hacerse coronas de flores para evitar la borrachera (Coronam). Otros se dedicaban a realizar una maqueta del triclinio, el comedor de los romanos compuesto por tres lechos con tres plazas cada uno (Triclinium aestivum); o a confeccionar una campanilla para alejar los malos espíritus del banquete (Tintinnabulum); o una figura para recordar durante el banquete nuestro paso efímero por la vida y por tanto nuestro deseo de aprovecharla al máximo (Larva convivialis). Incluso una escuela de música y danza para aprender a amenizar el convivium (Ludus).

Uno de los talleres dirigidos a los niños que me parecen más interesantes es el Laboratorio de Paleoantropología, un taller de arqueología que permite investigar los restos de un banquete y el grado de salud de que gozaban los “comensales” a través del estudio de los huesos. Un taller pensado para niños pero nada infantil.

Tampoco olvidemos otro de los protagonistas de los banquetes: los alimentos. Los más pequeños podían hacer una primera aproximación a todo tipo de viandas y sus precios (Habemus in cena) y también podían aprender a amasar pan ácimo y cocerlo (Panis).


Pero los adultos se podían deleitar con el Salsamentarius y la Caupona, una exhibición de todo tipo de ahumados, conservas, salazones y cocciones a cargo del Grup de Reconstrucció Històrica de Badalona. La parrilla romana está en marcha y el aroma es espectacular.


Otro espacio de recreación muy interesante es el de la moda tardorromana y la vida del ejército bajoimperial, a cargo del grupo de reconstrucción histórica Propugnatores barcinonenses, dedicado al estudio y recreación del Dominado Romano vinculado a Barcelona y su ager. Como se trata de la época del Bajo Imperio, se sitúan cerca de las fantásticas Termas, que datan del siglo IV dC. No solo nos enseñan la moda de la época para ir a los banquetes hechos un brazo de mar, sino también los alimentos propios de los soldados en campaña y en itinere, como la puls, el bucellatum, el trigo, la carne salada, las aceitunas… además de vajilla e instrumentos para la elaboración de los platos. No son quizá alimentos dignos de un banquete en las ciudades, pero seguro que sí en los campamentos.  



Y para acabar, pero no menos interesante, la muestra Specularia, sobre el material que antiguamente servía como vidrio y que generalmente se desconoce: el lapis specularis, un tipo de piedra de yeso fácil de trabajar y traslúcido que se empleaba para ventanas, a modo de cristal. La muestra, a cargo de la Asociación Lapis Specvlaris, nos trae para la ocasión un invernadero a escala como el que se dice que poseía el emperador Tiberio para tener a su disposición pepinos frescos todo el año, ya que se lo había recomendado el médico. Pepinos de temporada todo el año, un lujo imperial.

Pero no solo de talleres vive el público, así que, como viene siendo habitual, el festival se completa con la representación del grupo Evocati Apri Scipioni, que en este caso recrea un convivium. No falta de nada: cocina (cvlina), triclinio, larva convivialis… Los invitados, el duumviro y su familia y el aspirante a duumviro y su esposa, entran con el pie derecho, como debe ser, son recibidos por el nomenclator y situados en el triclinio de acuerdo a su condición e importancia para el anfitrión. Se trata de un convivium del siglo I aC y cuenta con todos los aspectos básicos que podemos encontrar en las fuentes escritas: el esclavo personal, la servilleta para guardar las sobras, el servicio de mesa, la ofrenda a los Lares, el memento mori, la música, los regalos, los cotilleos… y hasta un combate de gladiadoras.



El festival ha llegado a su fin. Una gran iniciativa del Museu de Sant Boi y de Kuanum, especialistas en la difusión del patrimonio cultural a través de los cinco sentidos. Volveremos, sin duda.

Imágenes: @Abemvs_incena

jueves, 15 de junio de 2017

LVDI RVBRICATI MMXVII. LA MUERTE EN ROMA.

Que la muerte es una cosa muy seria todos lo sabemos. Es una cosa tan seria tan seria que merece la pena reirnos un poco si no de ella, al menos con ella. Ese es el espíritu que se desprendía en el festival romano LVDI RVBRICATI, que ha tenido lugar el pasado fin de semana en Sant Boi de Llobregat, dedicado en esta edición a la temática de La muerte en Roma.

Los Lvdi Rvbricati son un festival que pretende trasladarnos al pasado romano de la ciudad… y lo consigue. Ubicado en los espacios del Museu de Sant Boi -los jardines de Can Barraquer, la masía de Can Torrents y las Termas Romanas-, el festival ofrece actividades, talleres y exhibiciones que tienen la finalidad de trasladarnos a la vida cotidiana de hace dos mil años.

Hasta aquí coincide con otros eventos de recreación histórica.
Sin embargo, los Lvdi Rvbricati se distinguen por una particularidad nada fácil de conseguir: el equilibrio que logran entre rigor histórico y diversión. Pasemos a ello. La temática de este año, la Muerte en el mundo romano, es tratada desde diferentes puntos de vista: desde un repaso de las creencias y rituales de la muerte, que se pueden apreciar en la exposición temporal Hic sitvs est (“Aquí descansa”), hasta la explicación paso a paso del ritual funerario -preparación del cadáver, cortejo fúnebre, transporte a la pira funeraria, contagio y purificación de la familia…- a través de la representación teatral Fvnvs, a cargo del grupo de recreación Evocati Apri Scipioni. A esto hay que añadir el amplio número de talleres y actividades dirigidas a toda la familia. Algunos francamente interesantes, como el Laboratorio de Arqueología, donde se hace una aproximación a las enfermedades más frecuentes de los romanos y se puede practicar como un auténtico arqueólogo rastreando entre los restos de un banquete funerario. Otros talleres no menos interesantes son el “Pollinctor”, para preparar bálsamos para el cadáver; el “Mavsolevm”, donde se puede elaborar la maqueta de la tumba del panadero Eurysaces; el taller de juguetes del ajuar de las tumbas infantiles, “Crepvndiae”; o el de tablillas de maldición -”Magica tabella”-, donde se puede elaborar una defixio como las que se colocaban en las tumbas para conseguir la colaboración de algún difunto especialmente enfadado. Todas actividades relacionadas con la muerte y el mundo romano, y todas dedicadas a los niños, que se lo pasaban bastante bien, sin ningún dramatismo, vaya. Además, el teatro donde se recrea el entierro de un niño, Aviolvs Lvcivs, con su cortejo fúnebre, su carro, sus plañideras…

Además de los talleres, el festival cuenta con juegos y con recreaciones de oficios de la vida cotidiana de los romanos, como la peluquería femenina. Entre estas recreaciones destaca sin duda la de Lapis Specvlaris, un mineral transparente y fácil de trabajar que los romanos explotaban en las minas de la Hispania Citerior, y que tenían multitud de funciones, siendo la principal la de servir de cristal para ventanas en casas y edificios públicos, como las mismas Termas del Museo, permitiendo el paso de la luz. Los autores clásicos también nos dicen que se usaban en invernaderos y como material de construcción, además de uso ornamental. Pero también se utilizaron como soporte para las maldiciones que después enterrarían en tumbas de difuntos prematuros. Hasta aquí se han desplazado diversos miembros del Proyecto Lapis Specularis, una asociación multidisciplinar dedicada a la investigación y la divulgación de la minería romana. Se agradece encontrar artesanos que te permitan cortar un pedazo de “cristal de Hispania”.




Pero que la muerte sea una cosa seria no quiere decir que tengamos que estar serios. Ya he dicho que un acierto de este festival (junto con las temáticas de cada año, otro acierto) es justo el equilibrio entre el rigor y la diversión. Así, además de desdramatizar el tema de la muerte mediante los talleres, afrontando todos los aspectos con naturalidad, nos estuvimos riendo bastante con la representación Fvnvs. El cadáver, un tal Lvcivs Bibacvlvs, conocido en toda la zona que rodea el Rvbricatvs por ser un bebedor pendenciero, muere dejando arruinada a la familia. Tras la comprobación del traspaso de nuestro Lvcivs se desarrolla todo el ritual: la limpieza del cadáver, la colocación de las monedas para pasar al más allá, la exposición en la tierra, el peinado de la desconsolada viuda, el color negro en las vestiduras, la confección de la máscara funeraria, la contratación de las plañideras, el traslado a la pira funeraria, el discurso de elogio…. Sí, todo el ritual, pero de una forma desenfadada y amena, que no incorrecta.


Los Lvdi Rvbricati son de esos festivales que esperas que lleguen y que te dan pena que acaben. El emplazamiento es único y las personas que lo llevan a cabo también. Felicidades. Volveremos.












Imágenes: @Abemvs_incena