Dentro de las jornadas de Tarraco a taula, iniciativa gastronómica muy interesante del festival romano Tarraco viva, se presentan diferentes restaurantes y bares con oferta de menú basado en la cocina romana. Nosotros, como somos muy del pueblo llano, nos hemos decidido una vez más por visitar una caupona y para ello nos personamos en la cervecería Alhambra (Estanislau Figueres 51) que, para nuestra sorpresa, ha cambiado la barra de su bar por una cómoda y amplia terraza correspondiente al hotel Cosmos.
Sin
embargo, pese al cambio de ubicación, la caupona mantiene en
todo momento su encanto original. La encantadora tabernera nos acoge
con cariño y nos presenta sus menús: "César" y
"Gladiator", planificados para poder degustar un poco de
todos los sabores de Roma.
Nos
decantamos por el primero, que se sirve además con maridaje de vinos
romanos.
Las
cauponae era locales muy populares. El pueblo romano las
visitaba a menudo, ya que permitían comer platos calientes y grasos.
Estos platos en muchas ocasiones era imposible prepararlos en casa,
ya que muchas de ellas carecían de cocinas. Las cauponae
abarcaban todas las categorías y hasta algunas eran de tanto postín
que tenían incluso triclinios.
Centrémonos
ya en la comida, inspirada por cierto en el mismísimo recetario de
Apicio. Antes de empezar el menú, nos ofrecen un apertivo
auténtiamente romano, unas aceitunas arbequinas aliñadas con
pimienta, mientras nos explican que no nos van a proporcionar
cubiertos, sino tan sólo una cuchara y un palillo para los
caracoles, lo cual nos parece muy correcto: si queremos comer romano,
hay que hacerlo como los romanos. Tras esto, se nos invita a que
hagamos un viaje en el tiempo, un viaje a los sabores y texturas de
la antigua Tarraco romana....
Comenzamos
por la gustatio, que se trata de un surtido de
aperitivos, nada menos que seis de ellos: Hipodrimma
(pasta de queso con muchos frutos secos), Moretum
(pasta de queso con ajos tiernos), Apua ova elixa
(anchoas con huevo duro), Sirapas (pasta de olivas con
miel y hierbas aromáticas), Marinatos sardos (sardinas
en escabeche) y Harenga (arenques condimentados
sorprendentemente con miel y pimienta). Deliciosos. Para la ocasión,
se sirve un vino Rosatum.
Seguimos
con los platos fuertes. Una nueva selección se suma a la
degustación. La Cucurbitas ad Alexandriam es una crema
de calabaza al estilo de Alejandría, super llena de especias
aromáticas y muy a tono con la temática del festival este año, dedicado a Egipto. Las Cocleas et porcinam aromataque son
unos caracoles con cerdo agridulce y especias, que se comen con el
reglamentario palillo, como los romanos. A este plato sigue un
Farcimen Lucanis, una sabrosa salchicha de Lucania al
vino mulsum que combina
perfecto con los demás platos.
Las
Fabalis cum vinum
son un plato de lo más consumido por los romanos, las habas, en este
caso al vino, con especias y garum.
Siguen los Indicum pisum,
los guisantes con sepia, otra legumbre muy del gusto del pueblo
romano. Y para acabar los platos fuertes, el Pullum
farcilis, un pollo en
escabeche ligero con verduritas. En este caso se degustaban con
mulsum.
Como
postres o secunda mensa, nos sirven Butyrum cum melle,
una cuajada con miel, acompañado de las Palmulae nuces
cum dactylis, un surtido de
frutos secos, y la Romanam navem,
una nave de hoja de lechuga con vinagreta de frutos secos. Para
beber, néctar Delicia de dioses, hecho con frutas, delicioso.
Siempre
es de agradecer la rigurosidad en la confección de los platos y en
la forma de servirlos. Por eso estamos muy agradecidos al esfuerzo de
este establecimiento.
Prosit!
Imágenes: @Abemvs_incena
Imágenes: @Abemvs_incena
Ana, Alhambra Beer, agradece tú ABEMVS INCENA descriptivo y muy correcto, me hace ver que disfrutasteis y valorasteis el esfuerzo que supone simular una CAUPONA. Ello anima a seguir investigando de cara al futuro.
ResponderEliminarSÉNECA ya decía :"La recompensa de una buena acción es el haberla hecho." :-)
Una experiencia muy agradable. Os animo totalmente a continuar. Un abrazo!
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